(2008. Dir: Sean Ellis). Basta que sea una producción de terror alejada de Hollywood para que tenga grandes probabilidades de ser diferente y sorprendernos con calidad. Y asi fue. Esta co producción franco inglesa logra ser una película seria, alejada de cualquier cliché típico de las películas de terror y aunque el argumento es algo flojo en el sustento de los acontecimientos, logra mantener la expectativa y el suspenso de manera ascendente.De la nada, los seres humanos vienen siendo "reemplazados" a travez de los espejos, matándolos uno por uno para tomar su sitio. Y este es el único argumento, no nos dicen ni cómo, ni por qué. Incluso es una copia de "The Body Snatchers" y algo de "Mirrors" pero se aleja de ellas por la manera de presentar la historia, centrándose en la amnesia de la víctima y de cómo debe atar cabos para darse cuenta de la realidad. Cabe resaltar la buena musicalización y el uso exacto de cámara lenta para algunas escenas.
