(2008. Dir: Gerald McMorrow) De un total desconocido director, llega esta producción británica que a mi entender no encaja en ninguna categoría. Drama? Acción? Futurista? Oscura? Sólo al finalizar el film puedes tener cierta sensación de calidad y de entendimiento porque desde que empieza hasta la última media hora simplemente quieres que acabe o que alguien te explique qué demonios está pasando aqui.Hay dos historias que el film va narrando: una en esta época, con jóvenes personajes desquiciados y con problemas. La otra en un futuro cercano, en una ciudad destruida moralmente, donde las religiones han acaparado todo y sobresale un personaje solitario, vengativo y marginal llamado Jonathan Preest, sediento de venganza de un tal "Individuo", que supuestamente asesinó a una niña. Las dos historias son confusas y aparentemente no llegan a nada ni nada las une, pero conforme la historia transcurre, uno empieza a darse cuenta de las similitudes y los paralelos. Ya en el desenlace todo cobra sentido. El punto a favor: la escenografía del futuro oscuro, llena de iglesias, parecida a una "ciudad gótica" y la presencia del personaje Preest, una mezcla de Darkman, Batman y Jack Skellington juntos. Lo malo: lo tarde en que presentan las similitudes para que el espectador pueda atar cabos y asi lograr expectativa. Me parece interesante la propuesta del director, siendo casi su debut en el cine, y ademas escrita por él mismo.
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