(2009. Dir: Dennis Iliadis) El maestro indiscutible Wes Craven realizó la versión original allá por 1972 con un presupuesto bajísimo, logrando impactar en la audiencia típica de los B-movies. Ahora, ante la casi nula creación de buenas historias, deciden realizar el remake del film reclutando al director griego Iliadis, sin mayor experiencia en el cine norteamericano, todo bajo la supervisión del buen Wes Craven.Y viene así: Un grupo de criminales que estan escapando de la justicia, se topan con dos jóvenes señoritas, donde una de ellas tiene a sus padres en una casa de vacaciones por el bosque. Al tenerlas capturadas, los criminales tienen la mala suerte de seguir escapando, y llegar a esta casa de los padres, quienes les brindan cobijo sin saber que son nada menos que los abusadores de su hija. Dan por muerta a la hija y los padres se dan cuenta del salvajismo: la venganza está servida.
Dirección correcta, actuaciones buenas dentro de un argumento (que no es idéntico al original) que sigue su línea sin llegar a lo absurdo. A pesar de la buena dosis de sangre y escenas fuertes queda la sensación que algo falta. Y es porque en el cine de terror ya se han visto muchas películas con el mismo corte (justamente la original era una de las primeras). A mi opinión se debió duplicar el gore, lo salvaje, lo brutal, para que asi esta película impacte de verdad. Por ahora, la película de culto sigue siendo la original (felizmente).
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